jueves, 27 de octubre de 2011

MUNICIPALIZACIÓN...¿LA SOLUCIÓN?

Baleares ha decidido externalizar la gestión de sus puertos. El motivo es económico, lo que significa llanamente que se quiere recaudar más de lo que se recauda. Para eso se ha pensado en darle a alguna entidad o empresa las instalaciones a cambio de un jugoso canon que supere el superávit que se obtiene actualmente de los amarres. Luego esa empresa o entidad sin ánimo de lucro querrá ganar un buen dinero con esos amarres que le permita pagar ese canon y destinar el resto a dividendos o a actividad social, según sea el caso.
Llegados a este punto del razonamiento nos habrá quedado claro a todos quién es el que va a pagar el guateque que nos está montando el Govern: el amarrista de a pie.
Pues bien, en Ciutadella se ha lanzado una idea que puede ser interesante y una de las pocas tablas de salvación a las que se puede intentar agarrar el usuario de los puertos susceptibles de ser subastados y es la municipalización de los mismos.
Se trata de un modelo ampliamente difundido en Francia y que cuenta con bastantes aspectos positivos a tener en cuenta.
El primero que vale la pena citar es que es el propio pueblo (su ayuntamiento) el que decide el modelo de puerto que quiere tener y de ese modo la gestión es más ajustada a los intereses de los habitantes del municipio en lugar de responder a la política y los recursos de una administración autonómica o nacional.
Por otro lado, aunque en absoluto menos importante, tenemos que el ayuntamiento decide las tarifas que se deben aplicar en función del papel que el puerto juega en la economía y la sociedad del municipio, por lo que puede apostar por unas tarifas más “sociales” si le interesa fomentar la actividad náutica y el acceso al mar de un mayor número de ciudadanos o bien otro tipo de tarificación más restrictiva. Pero en cualquier caso se puede asegurar que las tarifas serán más bajas que las de quien haya tenido que pujar en un concurso y deba pagar un canon desorbitado además de lograr su propio beneficio.
Y ya que hablamos de beneficio, parece bastante lógico que, de producirse éste, redunde a favor de la comunidad y de las arcas municipales en lugar de ir a parar a las cuentas de tal o cual sociedad o entidad sin ánimo de lucro.
Para que la gestión del puerto sea lo más acorde posible con los intereses de los diferentes usuarios del mismo, debería crearse un Consejo Consultivo en el que todos los colectivos afectados tuvieran su representante y así se supliría la falta de conocimiento de los temas náuticos que padecen algunos de nuestros ayuntamientos. De la misma manera cada uno de los diferentes colectivos (Pescadores, Golondrinas, Chárter, Clubes, Restauradores, Amics de la Mar, Varadero, etc. ) podrían hacer oír su voz en las decisiones que les afectan y participar en la gestión del puerto en el que ejercen su actividad.
La gestión diaria del puerto se puede hacer directamente por el ayuntamiento o bien mediante una empresa mixta del estilo de las que gestionan algunos recursos municipales, como las aguas, etc.
Del mismo modo hay que hacer notar que el ayuntamiento como administración tan sólo tiene que solicitar la cesión del dominio público a Portsib, sin tener que acudir a ningún concurso, con las ventajas que ello supone.
Tal y como lo he descrito me parece que es la única solución que tienen los usuarios de los puertos autonómicos para evitar que se cedan durante treinta años unos espacios públicos tan importantes para nuestra supervivencia. Quizás gestionar mejor nuestros puertos sea una de las pocas oportunidades reales que tenemos para dinamizar nuestra economía.

miércoles, 26 de octubre de 2011

LO QUE PIENSAN DE NOSOTROS

A algunos de nuestros políticos les vendría bien pasearse por algunos foros para ver son sus ojitos los errores que se han venido cometiendo con los amarres en nuestra isla.
Como muestra pongo un comentario que me ha parecido muy acertado por parte de un cofrade de La Taberna del Puerto.

"Lo que ocurre con los precios de los puertos en las islas Baleares es de verdadera vergüenza y un robo. Esto se evitaría si los ayuntamientos tomaran las riendas de dichos puertos, para beneficiar a todos.
1º A sus CIUDADANOS, ya que el único aliciente de las islas es el mar, con lo que lleva a que muchos ciudadanos pudieran tener su embarcación.
2º A los TRANSEUNTES, ya que si estamos en muelle/pantalón, bajamos, tomamos unas cervecitas, mientras las mujeres van de compra y ya que estamos bien amarrados nos iremos a cenar, beneficiándose el COMERCIO y la HOSTELERIA. Por el contrario si tengo que fondear, me acerco con la neumática a un supermercado, las cervezas y la cena a bordo.
3º Se basan en más demanda que oferta, MENTIRA, este año he visto los puertos de Baleares, sobretodo el de Mahon medio vacío. Influye el canon abusivo que les aplica el estado.
4º Quieren MEGAYATES, muy bueno para el concesionario del puerto, pero si ellos no salen ni a comprar y menos a cenar. Ya lo se, hay excepciones.
5º Puedo mostraros cientos de facturas de puertos del Mediterráneo. Para un 37 pies.
TURQUIA, en una marina sobre 42€, en puerto 18€ y cientos de ellos gratis si cenas.
GRECIA, lo mas caro EL PIREO, 47€, una marina, 26€, un puerto el primer día 12€ y el resto 4€, de Octubre a Mayo, gratis, un 50€% es amarrado a la Taberna, que lo pagas con la cena y un 20% gratis.
MALTA, en la marina 19€
ITALIA, tenemos de todo, en I. Capri 120€, la media en las marinas esta en 30€, en muchas me pidieron 60€ y termine pagando 20€, el regateo esta muy presente.
CORCEGA, Puerto de Bonifacio, 21€
BARCELONA, en el Port Olimpy 38€

MAHON - En las plataformas 49€ y trasládate con tu propia neumática.
En el Puerto 130€, LO MAS CARO DEL MEDITERRANEO.

Con los cientos de embarcaciones que hablo, todos me dicen lo mismo, las Baleares preciosas pero prohibitivas, estamos mejor por aquí.

Concluyo diciendo que el estado, llamase políticos de turno, todavía se cree que tener una embarcación es cosa de ricos, también lo fue el coche en los años 20. Falta de unión entre los propietarios y entidades recreativas, por lo que no se protesta y se patalea poco.

Un saludo. Fernando/RALIP.V"

No le falta razón en absoluto y está en nuestras manos cambiar el rumbo de estas atrocidades, al menos en Ciutadella.
Otra ocasión sólo se presentará dentro de 30 años, que es el plazo por el que le harán la concesión al mejor postor si les dejamos.
¿Daremos la talla?

sábado, 22 de octubre de 2011

LOS PIES EN EL SUELO

A nadie le ha extrañado la negativa del club a solicitar que sea Ports o un organismo público el que gestione los amarres del puerto de Ciutadella.
Hace dos años, cuando se celebraron las elecciones en el club, fueron muchos los que me comentaron que esta junta se presentaba con la intención de apropiarse de los nuevos amarres del Puerto de Ciutadella. Parece que el tiempo les está dando la razón.
Lo que no acaba de ser patético es la endeblez de la excusa que se han buscado para oponerse a una gestión municipal. Dicen que el ayuntamiento no puede asumir más servicios.
Les ha faltado acabar la frase. No puede asumir más servicios DEFICITARIOS. Pero el puerto de Ciutadella no es deficitario, como no lo es la zona azul de aparcamiento cuya gestión se ha municipalizado recientemente.
Por eso es interesante y hasta necesario para el ayuntamiento hacerse cargo de la gestión de los amarres que está acabando de instalar Ports.
Tan interesante es para el ayuntamiento como para el club náutico, cuyos responsables han mostrado un desmesurado interés por apropiarse de esas instalaciones tan "inasumibles" para el ayuntamiento.
Es muy de agradecer su ofrecimiento para aliviar al ayuntamiento de una carga tan pesada ofreciéndose incluso a pagar parte de las obras que se están haciendo. Sin duda su altruismo y desinterés asombra a propios y extraños.
Pero volviendo a poner los pies en el suelo las cosas se ven muy claras.
Es cierto que el ayuntamiento no puede asumir el coste de servicios deficitarios que no esté obligado a prestar.
Pero, como sabe muy bien la nueva junta, los amarres de Ciutadella no son deficitarios, sino que dan un buen dinero.
Y tratar de privar al conjunto de los ciudadelanos de unos ingresos que les son necesarios para desviarlos hacia una entidad que no los necesita es un ejercicio de cinismo sin límite.
Ciutadella necesita los ingresos de esos amarres muchísimo más que cualquier otro grupo de interés.

jueves, 20 de octubre de 2011

EL PUERTO DE TODOS

El Govern Balear está decidido a externalizar la gestión de los puertos que tiene encomendados, entre los que se encuentra el puerto de Ciudadela.
Esta actuación, que abiertamente se reconoce que tiene motivos económicos, arroja mucha incertidumbre sobre el futuro de nuestro puerto; las listas de espera; las tarifas; el personal empleado, etc.
Ante los importantes riesgos que comportaría una deficiente gestión de nuestro puerto o la creación de un monopolio en la gestión de los amarres de nuestra población, quisiera arrojar una idea que a mi parecer puede ser muy interesante.
Se trata de municipalizar el puerto de Ciudadela.
La municipalización es una forma muy extendida de gestión de los puertos en Francia y con este modelo se consigue que cada puerto se adecue a las necesidades del total de la población donde está radicado en lugar de responder a los criterios y prioridades de un organismo concreto, ya sea una administración basada en Mallorca o una entidad con sus propios objetivos e intereses.
De este modo, es el Ayuntamiento quien se asegura y garantiza que la gestión del puerto es la óptima para satisfacer las necesidades de todos los habitantes de Ciudadela y más concretamente las de los diferentes colectivos implicados en la vida portuaria: restauradores, pescadores, golondrinas, varadero, empresas de charter, club náutico, empresas de servicios náuticos, turistas náuticos, etc.
El puerto de Ciutadella no es deficitario por lo que, manteniendo el nivel de tarifas, empleo y servicios de Ports de les Illes Balears, podría aportar unos ingresos muy necesarios para nuestro consistorio.
Las ventajas de este modelo son evidentes: Mantenimiento de unas tarifas mínimas y no sujetas a criterios empresariales ni de otro tipo; adecuación de la gestión a los intereses de múltiples entidades y colectivos; anulación del riesgo de monopolización de los amarres y de gestión interesada de los mismos; “desmallorquinización” de la gestión de nuestros puertos; mejora de los ingresos municipales; fomento del turismo náutico correlacionando servicios y tarifas, etc.
El principal inconveniente es el reto que supone cualquier cambio de sistema de gestión. Los cambios cuestan de implementar y necesitan un esfuerzo por parte de todos pero creo que merece la pena hacerlo por tal de tener el puerto que necesita nuestro pueblo. Un puerto para todos.

sábado, 15 de octubre de 2011

La privatización

Escuchando la entrevista a Antonio Deudero en Gaceta Náutica Radio de la semana pasada me quedan claras algunas cosas:
La primera es que los puertos de gestión directa de Baleares se pueden dar por privatizados. Deudero dice que es una cuestión programática y que si legalmente es posible, que lo es, se van a privatizar.
La segunda es que esa privatización se hace por motivos económicos, o sea, para sacar pasta.
Y no es que no se saque mucha ahora mismo sino que se quiere sacar más porque los socialistas y nacionalistas han dejado la CAIB sin un euro en el cajón y se necesita dinero para pagar funcionarios, recetas, viajes, etc.
De estas dos cosas que nos quedan muy claras se deduce una tercera y es que esa pasta sólo puede salir de un sitio: del bolsillo del amarrista.
En definitiva, se ha hablado de las listas de espera, de los derechos a amarrar, de la calidad de servicio y hasta de la homogeneización de los servicios, que maldito al que le importe.
Pero la verdadera inquietud que tienen los propietarios de barcas ahora es la misma que tiene el Govern Balear: Cómo van a pagar las tarifas de su amarre si se concesiona a una empresa o un club que ahora mismo está cobrando tres veces más que lo que cobran Portsib por el mismo amarre.
En ningún momento de la entrevista se garantiza que se mantengan las tarifas de Portsib, lo cual dice mucho de la habilidad oratoria del Sr. Deudero.
Nadie le podrá decir nunca que dijo que no subirían los precios. Porque, dejémoslo claro, de subir los precios es de lo que se trata.
Las matemáticas son tozudas y si ahora la CAIB ingresa "X" y necesita ingresar más cediéndole las instalaciones y el personal a una empresa a cambio de un canon, la única forma de que la CAIB ingrese más es que esa empresa ingrese más de lo que se ingresaba antes. Y eso, para una superficie de amarres fija y manteniendo la plantilla, sólo se puede lograr subiendo las tarifas. En finanzas no hay milagros.
Todos los puertos en los que conviven Portsib y otra empresa viven la misma situación: que los amarres de Portsib se los rifan y los de la otra empresa son los últimos en ocuparse porque su precio es prohibitivo.
De forma que lo que se plantea es igualar tarifas pero por lo alto.
Eso no es lo que necesita el sector náutico ahora mismo y lo vengo diciendo desde hace tiempo.
El sector privado, tanto en marinas como en clubes, se ha dedicado a ordeñar a los amarristas cuando no a explotarlos descaradamente con condiciones y tarifas abusivas. Ya expliqué que se ha obligado a armadores a pagar toda la temporada cuando sólo querían un amarre para quince días; que se obliga a comprar barcas a una empresa concreta si se pretende tener amarre; que no se respetan los amarres de tránsito y que hay embarcaciones que pasan meses "por ser vos quien sois", ocupando amarres que deberían liberar en tres días, etc.
Abusos de todo tipo perpetrados con un bien público como son los amarres y bajo la tapadera del entramado de una concesión administrativa.
No es que Portsib esté al margen de todo esto pero hay que reconocer que su gestión había mejorado bastante en los últimos años, eliminando gran parte de sus deficiencias y manteniendo unas tarifas que hoy en día son las únicas asequibles en nuestra comunidad.
Todo esto se puede acabar ahora. Primero por la descerebrada gestión de un gobierno que gastó sin freno nuestro dinero y hasta el de nuestros hijos y nietos, llevando a nuestra administración a una quiebra técnica. Luego por la precipitación de unas medidas correctoras que corren el riesgo de dar la puntilla a un sector importantísimo en nuestro archipiélago.
Del mismo modo esa precipitación se hace sospechosa de amiguismo, colegueo y rapacidad al mercadear con un bien escaso y preciado como son los amarres.
Seguiremos a la espera de noticias porque esto no se ha acabado ni de lejos.

jueves, 13 de octubre de 2011

Vuelta a las andadas

Quiero disculparme por no haber escrito nada en todo el verano aparte de mis compromisos mensuales con La Gaceta Náutica, pero ahora que la temporada afloja el paso y puedo cerrar la tienda algunos días de la semana prometo ser más regular en mis aportaciones.
Además está la cosa movidita por Baleares y más concretamente por Ciudadela.
Habrá que comentar algo sobre la privatización que pretende hacer Portsib sobre una de las pocas empresas que aportan dinero a las arcas de la Comunidad Autónoma. ¿Porqué no empiezan privatizando IB3 y nos quitan a todos un muerto de encima?
Por otro lado habrá que comentar el órdago que ha lanzado el Club Náutico de Ciutadella para apoderarse de los amarres de la dársena interior.
También tenemos la retirada del PIC(Plan Insular de la Costa), que como ya había comentado anteriormente era una forma de derrochar el dinero asumiendo competencias que no se tenían transferidas al tiempo que se aumentaba la presión normativa sobre un sector ya de por sí sobrerregulado.
Algún apunte habrá que hacer sobre el proyecto de 380 amarres nuevos en Cala'n Bosch. Hay mucho que comentar sobre ello.
También habrá cosas que decir sobre el Club Náutico y los dos años que se han cumplido desde la toma de posesión de la nueva junta.
En definitiva, que volvemos al teclado; que el invierno promete ser calentito y que espero que os lo paséis bien leyendo lo que tengo que decir desde mi mesa del bar.

lunes, 3 de octubre de 2011

Privatiza que algo queda

Publicado en La Gaceta Náutica de Octubre 2011


El anuncio de la privatización de las instalaciones de Ports de les Illes Balears ha provocado una polvareda sobre la que quizás valga la pena hacer un comentario personal.
En mi modesta opinión la privatización puede tener como punto positivo el adelgazamiento del sector público. Es este un objetivo que ya se persiguió en su día cuando se convirtió Ports de les Illes Balears en empresa privada.
El resultado más inmediato y palpable de esa conversión fue la subida de las tasas portuarias en un 16% ya que, al ser liquidadas por una empresa privada, las tasas pasaron a estar sujetas a IVA. No sólo no se redujo el peso de esa administración sino que los usuarios tuvieron que pagar un impuesto sobre una tasa.
Ahora se ha insinuado la posibilidad de ceder directamente las instalaciones a los clubes náuticos, habida cuenta de su condición de entidades sin ánimo de lucro. Al margen de que ello sea o no legal, quisiera comentar algunos puntos que pueden tener su importancia.
Un club náutico, pese a ser una entidad sin ánimo de lucro, no busca necesariamente el interés de la totalidad de los ciudadanos del puerto donde está situado. Como mucho busca el interés de sus socios, dejando de lado a otros colectivos como los pescadores, empresarios de charter, restauradores, armadores de golondrinas, etc. Lo demás no está en sus objetivos.
La administración, al gestionar las instalaciones náuticas, hace de árbitro en las relaciones entre los diferentes colectivos que utilizan esas mismas instalaciones para ganarse la vida y ejercer su actividad. El ceder la gestión de esas instalaciones a uno solo de los colectivos implicados supone romper el equilibrio que debe existir entre ellos para que todos puedan lograr sus objetivos en mayor o menor medida.
Por otro lado los clubes náuticos, pese a ser entidades sin ánimo de lucro, distan mucho de ser entidades benéficas. Para medir la veracidad de esta afirmación basta con comparar las tarifas de amarre de tránsito de los clubes y las de Ports de les Illes Balears.
Por último cabe destacar que los clubes, además de no representar más que a un número limitado de socios, no son inmunes al dominio de determinados grupos de poder. De hecho no es infrecuente ver sentados en los sillones de sus salas de juntas a personajes que acumulan grandes dosis de poder político, económico o fáctico. De forma que poner la totalidad de los amarres de los puertos en manos de esas juntas directivas puede favorecer la creación de monopolios de influencias que obliguen a pasar por tubos bastante estrechos a quienes necesiten un amarre en un momento dado.
Porque la asignación de amarres en Ports de les Illes Balears está regulada por decreto pero en los clubes náuticos muchas veces depende de la decisión personalista de sus presidente o de la connivencia de una junta directiva o incluso de un gerente.
Las asambleas de socios y las juntas directivas muchas veces no tienen la capacidad de controlar adecuadamente que la gestión de los amarres no esté “contaminada” y se desvíe por motivos económicos o de otra índole.
Este panorama tan desolador lógicamente no afecta a todos los clubes ni mucho menos, sino que son notables los casos en que un club es modelo de gestión y de ecuanimidad en sus tarifas y servicios.
Por otro lado las empresas privadas de gestión de amarres, salvo honrosas excepciones, tampoco son la panacea para la correcta gestión de los bienes públicos que son los amarres. Así es de todos conocida la situación del Puerto de Mahón con sus desorbitados crecimientos en las tarifas, incumplimientos en los términos de las concesiones, etc. Pero en otros puertos es moneda corriente el cobro de tarifas abusivas así como el condicionamiento de comprar el barco a una empresa concreta para conseguir un amarre o la especulación salvaje a precios estratosféricos que ponen los amarres totalmente fuera del alcance de los habitantes de la isla.
Todo lo que he comentado podría constituir el motivo por el que las listas de espera de amarres de la administración son siempre más numerosas que las de los clubes o las de las marinas, cuando éstas existen.
De forma que, en mi modesta opinión, lo que debe plantearse como objetivo el nuevo gobierno es mejorar la gestión de Ports y potenciar el papel de estas instalaciones como dinamizadoras de la economía y del turismo náutico. Este objetivo no se consigue en absoluto mediante la subida de tarifas derivada del canon que paga el ganador de un concurso sino aumentando la eficiencia de la gestión pública y la calidad de los servicios ofertados por la administración. Quitarse el muerto de encima y dejárselo a otro para que lo convierta en una mina de oro a costa del amarrista no es la solución. Que no es fácil salta a la vista pero creo que algún día alguien tendrá que empezar a hacer las cosas como deben hacerse.